Promuevo un ambiente de trabajo participativo, inclusivo y, por su puesto, que permita que la organización crezca. Pero, es innegable que en nuestro camino nos toparemos con gente tóxica, dañina, que es un riesgo para la cultura de tu organización y para sus resultados.

A ese tipo de personas la impulsan diferentes motivos, los cuales no exploraremos ahora, pero el resultado es el mismo, un inminente riesgo para la organización.

Es muy importante aclarar que hay ocasiones en las que algunas personas bajan su rendimiento por motivos de fuerza mayor, o que cuando se expresan de forma inadecuada están expresando alguna dolencia, malestar o infelicidad que llevan dentro.

En ese caso la comprensión del equipo es una opción que no debemos descartar, hay gente que solo necesita un poco de paciencia. Tampoco hablaremos de esas personas en este post.

Hablamos de quienes buscan valerse de tu organización para cumplir otro cometido, puede ser perpetuarse en un cargo del cual reciben algún tipo de beneficio ilícito, o que tienen dentro una indisposición hacia sus compañeros que la o lo empujan a actuar malintencionadamente.

Este tipo de manzanas van rebotando de organización en organización hasta hallar una lo suficientemente fértil como para establecerse y podrir a más manzanas para perpetuarse.

Sé objetivo en tu análisis

Analiza detenidamente cada caso. ¿Qué te impulsa a perfilar a cierta persona como nocivo para tu organización?

Elimina cualquier sesgo que te pueda estar empujando a emitir una opinión errada. Básate en los hechos.

Involucra al Equipo

Una forma de eliminar el sesgo es el de involucrar al equipo, es muy sano conocer las opciones y percepciones. Recuerda que a un líder muchas veces le dicen solo lo que quiere escuchar y tener diferentes puntos de vista permitirán armar mejor el perfil de tu organización.

Te permitirá saber aquello que de otra forma difícilmente te enterarás. Aquí tengo que hacer una aclaración importante: ¡NO PRESTES ATENCIÓN A LOS CHISMES! Una cosa es involucrar al equipo y pedir su opinión y otra es prestar atención a chismes. Un líder no se presta a esas cosas, entre otras cosas, porque puede hacer que tomes decisiones equivocadas al no tener fundamentos sólidos para ello.

Barreras de Entrada

Invierte tiempo en evitar que personas tóxicas entren a tu organización. Eso te evitará muchos problemas. En muchos países el tiempo para ratificar una contratación es de 3 meses, trata de conocer lo más posible a la persona que vayas a contratar en ese tiempo, y que la persona también sepa a qué tipo de empresa está entrando. Si hay oportunidad de tener un período previo de pasantía, o si cuentas con más tiempo antes de confirmar que una persona es la ideal para tu organización y viceversa, aprovecha cada segundo, no tomes decisiones solo por tapar vacantes. Invertir tiempo en este proceso valdrá la pena.

Olfato

Confía en tu instinto, si sientes que algo no está funcionando como debe o si los números muestran alguna anomalía actúa, investiga la situación para tomar una buena decisión.

La Cultura de tu empresa no es para todos

Ni todos los talentos son para tu organización. Es así, y no puede forzarse, cada persona tiene su lugar y cada lugar su grupo de personas. Crea la mejor cultura posible, que haya suficiente confianza e interés por parte de la gente para que sean ellos mismos quienes en su momento denuncien si alguien tiene malas intenciones dentro de la misma. Ese es uno de los máximos logros para las organizaciones, cuando es ella misma quien detecta y remueve gente nociva para el equipo.

Por los demás

Es difícil tomar estas decisiones, pero como líder debes hacerlo, no solo por tu organización, sino por los demás colaboradores, por aquellos que genuinamente ponen el hombro cuando se presenta un problema, aquellos que quieren que la organización crezca y ellos con ella.

Aunque no sea común decirlo, remover manzanas dañinas también se hace por aquellas personas que quieren un lugar de trabajo sin conflictos y sano. Es una distracción para lograr las metas del equipo cuando hay que pasar de conflicto en conflicto solo por unas cuantas personas perjudiciales. Ser un líder no es fácil e implica tomar este tipo de decisiones.

Llegado el momento recuerda mantener la compostura y en lo posible llegar a un acuerdo. Todo el proceso debe manejarse con respeto de ambas partes y a través del diálogo. Todo lo contrario solo será echarle gasolina a un incendio. Recuerda que todos los conflictos pueden resolverse dialogando. Si la otra parte se pone en una postura demasiado beligerante aún así recuerda que no es personal, muchas personas llevan mucho dolor dentro y no encuentran otra forma de expresarlo. Ponerte en el mismo plan no ayudará. Es algo de trabajo y debes tener mucha fuerza para evitar que te afecte a nivel personal aunque se toquen todos los nervios que tienes. Mantén la calma y sin duda encontrarás una solución a todo lo que se presente.

Te deseo lo mejor.

Buena caza, guerreras y guerreros.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *