Cada persona es un universo. Podemos tener conocer a alguien superficialmente, pero nos resultaría casi imposible conocerlo(a) en profundidad. ¿Tienen los líderes un lado oscuro que no conoceremos?

La Sombra

Según el psicólogo Carl Jung, todos tenemos una sombra como parte fundamental de nuestra psiquis. Representa lo inconsciente de nuestro ser, aquello que no llegamos a percibir pero que sigue siendo parte de nosotros.

Como un océano, el inconsciente, la sombra, representa todo aquello que se encuentra por debajo de las profundidades. Donde la luz (nuestra conciencia) ya no llega.

No sabemos qué se encuentra adentro, pero es muy importante reconocer su existencia.

Negar o reprimir

Cuando negamos, o peor, reprimimos nuestro inconsciente, éste se manifiesta a través de impulsos o actitudes primitivas, prácticamente incontrolables para nosotros.

Aquí aplica perfectamente la frase: “lo que aceptas te transforma, lo que niegas te aprisiona”.

Únicos(as)

Es importante que dejemos de negar o reprimir nuestra sombra para que no recibamos el culatazo de ese esfuerzo.

Hacerlo es un trabajo personal, no podemos compararnos puesto que nuestro ser es único, no hay dos iguales y copiar no nos resultará útil.

Pero, hay algunos indicios que podemos seguir para comprender por dónde va nuestro caso. Por ejemplo, el deseo de acumular riquezas, poder u otros similares. Algo así puede ser parte de nuestra sombra, y negarlo o reprimirlo solo hará que se manifieste descontroladamente con repercusiones que pueden “sabotear” nuestros esfuerzos conscientes por lograr nuestras metas.

¿Sombra mala?

Según muchos autores este estrato dificulta la posibilidad de decir si algo es bueno o malo. En este nivel las cosas solo son, ni buenas, ni malas, solo son lo que son. Un instinto primitivo alojado en un nivel que difícilmente podemos percibir, no es tan fácil de clasificar.

De hecho, reconocer nuestra sombra nos permite “integrarla” de manera armoniosa evitando recibir esos temblores repentinos que parecen sabotearnos.

Pese a la presión social (que también varía de tiempo en tiempo) no debemos avergonzarnos de nuestra sombra, es parte de nosotros, debemos integrarla en nuestra vida sin que cause ningún daño a otra persona. Por ejemplo, si en mi sombra se encuentra un intenso deseo por estar en el poder, debo aceptarlo como parte de mí, y debo traer eso a mi consciencia para lidiar con ello de la mejor manera, como dije, negarlo o reprimirlo resulta en que se manifieste de maneras que son más difíciles de controlar y pueden causar problemas.

Es un tema tan extenso como apasionante, por lo cual hoy cubrimos las bases, pero con seguridad volveremos a tocar este tema en un futuro. Hasta entonces.

Te deseo lo mejor.

Buena caza guerreras y guerreros.

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