Las grandes ideas cambian el mundo cuando se ponen en ejecución y logran generar un impacto. Pero su origen es aún bastante debatido. ¿Vale generar decenas de ideas y ser una fuente de ellas? ¿Qué implica realmente darle vida a una idea?
Cuánto vale una idea
Como acabamos de mencionar, por sí sola no vale nada, adquiere valor cuando se ejecuta y causa impacto.
Tener decenas de ideas almacenadas en nuestra cabeza o escritas es una señal positiva, pero les damos valor cuando las compartimos a través de su realización.
Las Ideas Exigen
Hay quien dice que las personas solo tienen una gran idea que ejecutan a lo largo de su vida.
Puede que no sea del todo preciso, pero lo menciono porque una sola idea puede requerir de nosotros años de dedicación.
Una empresa, un proyecto, un sueño, requieren nuestro tiempo, nuestra energía y nuestros recursos financieros para llevarse a cabo.
Hace un mes escuchaba un podcast donde el anfitrión decía: “está excelente que tengas muchas ideas, pero durante una semana intenta hacer todo lo necesario para ejecutar al menos 2 de todas ellas y verás que no solo se trata de tener ideas, sino de escoger una y ejecutarla”.
Hizo alusión a lo exigente de materializar ideas, especialmente si ya tienes otras actividades y obligaciones durante el día.
Pasar de ser espectador a ser actor
El llevar a cabo una idea requiere ser activo, hacer cosas, en cambio solo almacenarlas es algo pasivo.
Ejecutar nuestras ideas requiere experimentar, vivir y hasta fracasar, pero es todo parte del proceso de crear, un proceso creativo, no refiriéndonos a que sea artístico, sino porque al hacerlo estamos creando algo, transfiriendo una idea al mundo real.
¿Quién conduce?
Dos comediantes hablaban sobre las grandes ideas, cuando uno tiene una gran idea y la determinación de llevarla a cabo y conduce el auto hasta la meta, pero planteaban también otro escenario, de la idea estando al volante diciendo “¡tranquilo! Tú sube, yo sé dónde tenemos que ir, yo conduciré”
Esa alusión al poder del proceso creativo no debe obviarse y exige de nosotros estar atentos, de escuchar en nuestro interior por si hay alguna idea así de poderosa y subirnos al carro.
Te deseo lo mejor.
Buena caza guerreras y guerreros.