Introducción
El Multitasking hace referencia a cuando una persona u organización maneja múltiples proyectos al mismo tiempo.
Usualmente bajo la premisa de que al apostar por múltiples proyectos alguno de ellos resultará. Si bien la lógica tiene sentido esto es lo que nadie te dice.
No hablo de atender a los hijos, estar en una reunión mientras haces pesas y tienes algo cocinándose. Me refiero únicamente a multitasking de proyectos, emprendimientos y negocios.
Exigencias
Trabajar en múltiples proyectos exige “parte” de tu concentración, tiempo, energía e incluso dinero para cada uno. Dado que esos recursos no son ilimitados tendrás que priorizar a qué proyecto asignar más.
Claro que todo está en tu nivel de involucramiento, si en algún proyecto solo figuras como inversionista tu rol está en conocer cómo marcha el proyecto, pero no mucho más que eso, si por el contrario tú administras el proyecto tratar de manejar muchos al mismo tiempo te ocasionará jaquecas que ni te imaginas.
El momento que un proyecto empieza a crecer exige de ti muchos más recursos, de pronto requieres
Si un proyecto requiere de nosotros 2 horas por semana, tendemos a empezar algo nuevo en el tiempo libre, lo que yo sugiero es seguir la línea del proyecto que ya tienes entre manos, si buscas nuevos clientes no empieces a buscar clientes de otro servicio o producto, puedes empezar a buscar nuevos clientes de aquello mismo que ya vienes trabajando. Es cuestión de no perder la concentración.
A veces los proyectos no tienen una intención clara, los empezamos solo porque tenemos tiempo libre y aunque pueden llegar a ser prometedores si nos enredamos en muchos pues tendremos que escoger.
El valor de un proyecto a medias
No toda idea es buena, de hecho, no valen nada, cuando se ejecutan, cuando empiezan a marchar es cuando recién adquieren valor, pero si tienes un montón de ideas (proyectos) a medio avanzar sin llegar a consolidarse es lo mismo que nada.
Un proyecto bien plantado y en marcha valdrá mucho más que 5 o 10 abandonados a medio camino. Lo sé porque yo tengo un montón de proyectos que quedaron a medio camino, con mucho potencial pero que finalmente están ahí, sin agregar ningún valor.
Esos proyectos representan una experiencia y enseñanzas, pero no cumplen su cometido. No puedes dejar tu recorrido sin ningún proyecto con el que te hayas comprometido por completo.
Recomiendo que si tienes un negocio aparte de tu trabajo de 8 horas te concentres en hacerlo crecer y no pretendas manejar más porque terminarás perdiéndolo todo.
Tampoco es imposible
Cuando tienes una buena cantidad de recursos y tu rol en cada uno es totalmente claro (y aceptado por la organización, no vaya a ser que te reclamen por falta de involucramiento) sí es posible.
De todos los recursos, energía, concentración, tiempo y dinero el único que puede “multiplicarse” es el financiero, por lo cual actuar como un inversionista es una forma de hacer multitasking de forma segura (e incluso ahí uno debe concentrarse para no quemar dinero a lo loco).
Si vas a hacerlo, la regla de oro es: maneja los proyectos que tus recursos te permitan, tiempo, energía, concentración y dinero. Si ya estás con ellos medidos, no cometas el error de empezar uno nuevo, terminarás descuidando el que ya tienes y no podrás dedicarle lo necesario al nuevo.
Entretanto recuerda nuestro artículo “Decir que NO” y desecha todo aquello que te distrae de tus cometidos. Especialmente si estás empezando, ya verás que podrás dedicarte mucho más y esperarás mucho menos para saber si tu proyecto tiene potencial o si el mercado aún no está listo. Te deseo lo mejor.
Buena caza, guerreras y guerreros.